miércoles, 23 de marzo de 2011

EL OBJETO COMO HILO CONDUCTOR


A veces los cuentos parecen inconclusos, porque no se ha sabido resumir una historia demasiado grande. Un cuento no es una historia grande resumida, es una historia muy pequeña que extendemos. Para conseguirlo es importante FOCALIZAR     Para focalizar no deben presentarse muchos personajes, tiempos distintos o lugares diversos. Es interesante que una cosa sirva como eje o hilo conductor, ponerla en primer plano e ir “tirando” de ella.

El CORRELATO OBJETIVO se basa en construir un texto con un conjunto de objetos, no demasiado numerosos, que pertenezcan a un mismo campo semántico y repetirlos. Si recordamos, por ejemplo, el comienzo de “El coronel no tiene quien le escriba” podemos observar como, mediante la repetición, sucesión y conexión de palabras de un mismo campo semántico crea una emoción, hace que desconectemos del exterior y que esos objetos acaben por evocarnos de inmediato esa emoción al producirse los siguientes hechos.
Escribir un cuento con la excusa de un objeto, cotidiano o mágico, especial o vulgar, es también una forma de decir mucho con una simple imagen: ese objeto puede ser metáfora, símbolo, sugerencia, puede crear un ambiente o provocarnos una emoción. ¿Nos ponemos a ello?

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