lunes, 30 de agosto de 2010

COMO CREAR PERSONAJES CREÍBLES

Tenemos una historia y nos proponemos crear los personajes que vivan en ella. ¿Asustados? No hay por qué. No necesitamos ninguna fórmula mágica, ni la arcilla primigenia con la que los dioses crearon a los hombres. El personaje, como el resto de los elementos de ese mundo que ponemos en pie con nuestros escritos, se crea únicamente con palabras. Con palabras contamos lo que hace, lo que dice, lo que piensa, lo que es. Sólo es necesario aprender a manejar esas palabras, tantear  con esa barro común hasta saber cuándo y qué conviene que haga, diga, piense.
Como las recetas no nos van a venir del cielo, tendremos que irlas fabricando nosotros mismos:
1.-Leyendo, desmenuzando, intentando comprender cómo han hecho los grandes autores para crear nuestros personajes favoritos: qué hacen, qué dicen, qué callan, por qué.
2.-Practicando. A través de nuestros errores y aciertos iremos viendo qué sobra y qué falta, qué debemos hacer y qué no, y (muy importante) cual es nuestra forma personal de conseguirlo.
3.-Observando y comprendiendo a los demás y a nosotros mismos nos será más fácil meternos en la piel de cualquier personaje. Ya sólo por esto merecerá la pena el intento: siempre nos ayuda, como pago extra, a comprendernos mejor a nosotros mismos y a los demás.

Marcamos los pasos de nuestros personajes...
¿o rastreamos sus huellas?
Pero cuidado con los seres de ficción: a veces se nos rebelan, hacen o dicen cosas que nos trastocan el argumento, ponen patas arriba las relaciones que les teníamos planeadas, nos dejan con cara de pasmados,  como si fuesen ellos los que nos estuvieran escribiendo desde el otro lado de la realidad.
Y ese, para mí, es uno de los momentos más intensos de la creación literaria: siento que realmente cobran personalidad, que están intentando decirme que lo que tenía pensado para ellos no les cuadra, me piden que me deje llevar hasta el lugar donde verdaderamente existen.
Nunca les niego un capricho. Mi recompensa es un camino desconocido y lleno de sorpresas.


jueves, 26 de agosto de 2010


EL HIJO DEL HÉROE.

Ascanio Iulo, el hijo del héroe troyano Eneas, es un príncipe adolescente para el que la guerra y la lucha por la supervivencia son asuntos de los que ha oído hablar, pero que quedan fuera de las murallas de su ciudad y de su vida. Pero cuando Troya arde, a manos de sus enemigos griegos, Iulo tendrá que iniciar junto a los suyos un largo viaje hacia el desconocido occidente, un viaje lleno de peligros, descubrimientos, emociones encontradas y pruebas que le convertirán en el verdadero héroe que su pueblo necesita: el que está dentro de cada uno de nosotros cuando la necesidad nos pone tras su pista.
"El hijo del héroe" es una novela de aventuras, basada en las leyendas antiguas (la Iliada, la Odisea, la Eneida) y los comienzos de la historia de Roma. Dirigido en principio a un público adolescente, puede disfrutarse también por los adultos: los que se sientan atraidos por la historia antigua, los que gusten de esas historias que hablan de las relaciones entre padres e hijos, del amor, de la amistad... o los que, simplemente, quieran sumergirse en una aventura de final inesperado.