viernes, 7 de febrero de 2014

Recital 12 de febrero


El próximo miércoles, 12 de febrero, y en la sala "La noche boca arriba" , Salitre, 30, Madrid, tendrá lugar un recital muy especial de mi poemario "Metamorfosis cotidianas", ya que van a acompañarme un grupo de estupendos poetas y amigos que darán a mis poemas una nueva voz, un sentido hasta ahora oculto, una vida nueva:

                                    MARIA JOSE CORTES

JOSE MIGUEL URBANO
MARIANA PESCI
                                                                                           DEBORAH ANTON
                      REBECA ALVAREZ CASAL DEL REY
                                                                                     MARGA MAYORDOMO
                           MARIA SOLÍS

y, como siempre, organizándolo todo, HIPOLITO GARCIA, "BOLO"

Os esperamos a partir de las 21 horas.
Y este es un adelanto de mis poemas:


 

PASO SUBTERRANEO

Ya nadie se atreve a cruzar el túnel.

No pasan los barrenderos,
hartos de recoger dientes de yonky,
vómitos fríos de niño borracho
viejos que no saben ni dónde viven.

Ya nadie se atreve a cruzar.

Los violadores no acechan.
Los de allá prefieren pagar en rublos

a los reponedores de vírgenes

desechables.

Los de acá se despachan en familia,

como siempre se hizo.

 Ya nadie se atreve.

 No duermen los vagabundos:
se refugian en los nichos del cementerio nuevo.

Sus mantas abandonadas y las cenizas de los periódicos

recorren el túnel

como ratas gigantes que agonizan bajo una ventisca negra.

 Ya nadie se atreve a bajar al subterráneo.
Los de allá temen perderlo todo.

Los de acá tememos encontrarnos.

 


 


domingo, 2 de febrero de 2014

EN MEMORIA DE FELIX GRANDE


Félix Grande, tal vez el mayor poeta español que aún teníamos entre nosotros, falleció el pasado viernes. Como despedida a un poeta, nada mejor que su palabra de poeta. Carnal e intensamente unido a la vida en sus versos, no da su ungüento de poesía donde nos recuerda lo inmediato, lo intenso, lo eterno de la palabra: haberla paladeado, devorado, vivido. Como la vida.
No muere mucho quien vivió tanto.



DAME UNGÜENTO DE CARNE, LOBA

La prisa despareja con que miro tu piel

la premura apretada con que altero tu cuerpo

y este desasosiego en que empapo mi lengua

para hablarle a tu carne y lamer a tu voz

son como ávidas gotas de estaño compasivo

que busca aminorar las grietas de la muerte


La planta de la edad nos chupa nuestros días

abriéndose como una flor negra, abominable

y en este esplendor de hoy se oculta la simiente

de una desposesión calcinada y perversa

como la del desierto. En el calcio del tacto

hay una lenta caries que nos invade desde

el fin aterrador del tiempo y de la vida


Presuroso y perdido unto en mí tu persona

y soy un bulto de hombre y de loco y de perro

que corre por tu cuerpo y a la vez por un túnel

despavoridamente lamiendo en las tinieblas