Los pasados , 13, 14 y 15 de julio tuve la estupenda experiencia de asistir, con un grupo de amigos poetas, al PAN, el encuentro de arte vanguardista que se celebra en la villa de Morille, Salamanca, desde hace ya 10 años, y que este año tenía a la poesía como protagonista.
La estación de autobuses |
Pero el PAN va más allá de la poesía, del arte y de la experimentación. El propio pueblo es un continuo descubrimiento artístico, y el entusiasmo y la participación de sus habitantes algo que estimula y sorprende.
Nada más llegar asistimos a la inauguración de las jornadas, en una estación de autobuses que ya es en sí una obra de arte y de imaginación. De ahí, a un recital poético que recorría el cementerio de arte, un espacio único donde, cada año, un artista entierra una de sus obras de arte.
Demostración de pintura japonesa |
Luego, una continua secuencia de actividades, exposiciones, charlas y recitales durante tres días. La exposición y el taller de caligrafía japonesa de Miguel Elías nos hizo disfrutar de la calma y el silencio interior, el de poesía visual de Raquel Serdio fue una puerta a la imaginación y ¡qué decir del de alta cocina okupa, de Jaime "el Gamba". La "Pan Session", donde disfrutamos cada noche de las actuaciones de grandes poetas que son también grandes showman: Jesús Urceloy, Antonio Romar, Josep Pedrals, etc. La curiosa exposición de las piedras de wolframio que las madres de Morille habían forrado de ganchillo, así como las barandas del puente, según la iniciativa del poeta Antonio Gómez.
Recitando en el Anfiteatro de la Fuente |
Mis compañeros y yo también tuvimos ocasión de presentar nuestras obras, en el recital poético que se realizó en anfiteatro, con la agradable brisa del atardecer, el campo como escenario y la maravilla de contar con un público de todas las edades dispuesto a escuchar sin prejuicios.
Manifiesto gastro-poético |
Tiempo para la poesía, la imaginación, el buen comer, pero también la reivindicación, cuyo momento cumbre estuvo en el "manifiesto gastropoético", realizado por Jaime el Gamba y sus compañeros, que lanzaron alimentos y desafíos contra políticos y banqueros. Ya caía la tarde del domingo cuando se mostró el video, grabado a vista de pájaro sobre Morille, para apreciar el último proyecto realizado para el PAN 2012: un dibujo trazado en los campos de trigo, a la manera de los supuestos misteriosos círculos realizados por naves extraterrestres, que muestra hacia el firmamento un puño con el dedo corazón extendido: un aviso a los marcianos de que no les tenemos miedo ni queremos que se metan en nuestras cosas.
Esto es Morille: el arte en la vida cotidiana, el arte como juego, el arte adaptado al medio en el que vive, el arte no elitista ni populista, el arte que se regenera a pesar de las crisis. Aunque los marcianos se lo prohibieran, Morille seguiría siendo PAN. Pan bendito.
Entre una actividad y otra, siempre hay un momento, una copa y una sombra para la tertulia. |